Hace tiempo, el poeta y filósofo, español, Jorge Agustín Nicolás Ruiz, estableció la frase: “Quién olvida su historia está condenado a repetirla”. La misma da la bienvenida a los visitantes del bloque número 4 del campo de Auschwitz I. Lugar que, por todos es sabido, se llevó a cabo los atentados más grotescos y deplorables contra la humanidad.
Se extrapola cuando se quiere evitar que sucesos y hechos del pasado se queden en el olvido por las generaciones que siguen y evitar con esto, impunidad y desconsideración por aquello que se debe evitar olvidar. Del pasado debemos aprender y asimilar para no repetirlo y ser mejores en aquello que nos equivocamos.
Hemos hecho este introito, a propósito de la desafortunada idea de la Liga Dominicana de Béisbol Profesional (Lidom), que buscaba reconocer o realizar la dedicatoria del torneo de béisbol otoño-invernal, 2018-2019, al ex presidente de esa entidad, Leonardo Matos Berrido. olvidando u obviando, el hecho en el que se vio envuelto este señor en el año 1982, cuando fue acusado de la muerte de su esposa peruana, Edith Gómez. En aquella oportunidad no solamente se quiso asesinar físicamente a esta mujer que rogó por su vida antes de ser asesinada, por sus hijos y a pesar de ello, lo llevó a cabo.
A pesar de todo lo que ha acontecido y acontece en este país, que cada año se matan más de 150 mujeres a mano de sus ex compañeros o ex esposos; que la entidad que dirige el deporte nacional, se haya equivocado de tal manera, en buscar nombrar el evento que todos los dominicanos seguimos desde el mes de octubre hasta el mes de febrero, se ha colocado en tal afrenta de buscar nombrarlo como reconocimiento a favor de una persona que tiene en su haber un crimen de esa naturaleza, y del cual a tantos años ha quedado impune por toda la influencia política y de poder del momento. En el que ese tipo de acciones eran vistas, con mayor fuerza, dizque: “pleito entre marido y mujer”; y el hombre que se sentía “ofendido”, tenía patente de corso para hacer lo que quisiera.
La respuesta que recibió la Liga, fue un rechazo rotundo por redes sociales y medios de comunicación, que sin estar comprometidos con este ocultamiento impune a sabiendas, salieron a rechazar tal desatino. Al parecer, muchos le recordaron a los directivos de la Lidom, que la historia no se olvida por más polvo que sobre ella caiga o que se le intente ocultar o cubrir con el manto de la impunidad.
A raíz de todas las protestas generalizadas que se hicieron, la institución mencionada, decidió suspender el mencionado y infausto reconocimiento. Y luego procedió a otorgarlo a nuestro gran Vladimir Guerrero, que tiene méritos más que suficientes para el galardón.
Claro, se procedió a buscar enmendar el tollo con algo glamoroso. Lo penoso de todo esto es que la misma Liga no se hubiera decidido desde un principio por el mencionado ex grandes ligas y miembros reciente del Salón de la Fama de Cooperstwon, sino que lo utilizara para salir bien de un atolladero en el que ella misma se metió. No sabemos a ciencia cierta cómo o a quién se le ocurriera realizar dicha mención en favor de Matos Berrido con tantas cosas ocurridas últimamente de hechos que empañan la situación de la mujer y de acusaciones de acoso sexuales y violaciones, en contra de personajes conocidas de la opinión pública.
Al menos rectificaron su error, sin embargo, tuvo que salir el clamor público, para que se hiciera tal enmienda, porque de no haber sido así, este próximo torneo hubiese tenido desde ya, un sabor sumamente a cal y a cicuta.
Que nos sirva de ejemplo lo que ha sucedido, para que rechazos de esta naturaleza y de protesta cívica y pacífica y espontánea, sea por igual cuando se intente realizar a favor de corruptos y asesinos de muchos de las hijas e hijos del pueblo dominicano, que andan deambulando por las calles de este país como si todo cuanto hubieran hecho, merecen una placa o premio, y haciendo creer que con ello, limpiarán sus culpas, delitos y crímenes. La historia no debe olvidarse, recordarla es hacer memoria para los que hoy no pueden hablar ni defenderse de forma justa.
Le salva en algo la designación de Vladimir a la Liga, luego de ese gazapo, pero no deja de preocupar, cómo es posible que no se pensara de primer plano en él, en los reales méritos de un ser humano y en aquellos que son los verdaderos parámetros de una sociedad decente. Sin embargo, es bueno recordar, que en un orden social como el que hoy padecemos; donde el rastrero; asesinos; corruptos; cómplices; estafadores; sinvergüenzas: lambe sacos; sin respeto; ni dignidad; e irresponsables; son los que cuadran perfectamente con el mismo.