Producción

Una producción de Lucía Medina para Al final de la Tarde con Jordi.
Programa Nominado a Premios Gardo 2020, en Actualidad, Región Norte

lunes, 15 de octubre de 2018

¿Qué nos mueve?


En la vida de todo ser humano, existen diversas motivaciones que pueden hacer del mismo un gran guerrero o de buenas a primeras, alguien que pueda se dominado por la apatía, el cansancio y la desesperación.

Todo va a depender qué tiene cada quién como su principal motor que le inspira a moverse en su existencia y le alimenta el espíritu para enfrentar cuantas batallas puedan presentarse en un momento determinado.

Es normal que podamos pensar que las malas o duras experiencias solo sirvan para derrotarte o verlas como especie de castigo. Sin embargo, de donde más fortaleza podemos extraer y donde más puedes conocerte y de lo que puedes ser capaz de hacer para no rendirte, es de aquellas que te han tumbado o te han puesto en la peor situación, o aprendes, o estás condenado a repetir.

Cada quien puede ver una tormenta como una pequeña lluvia, dependiendo del tipo de enfrentamientos que ha tenido que asumir durante su vida. Ahora bien, no es la cantidad de eventos o acontecimientos en la existencia de una persona lo que lo define, necesariamente, sino, qué tanto es capaz de asimilar lo que ha superado y aquello que por momentos lo ha tambaleado.

A veces debemos identificar qué fuerza nos mantiene de pies. En qué prueba te diste cuenta de que eras valiente o pudiste superar el temor y el miedo. Dicen que la vida es una enseñanza, dependiendo en la medida que tú puedas aprender de ella.

Asimismo, resulta importante saber qué tanto hemos aprendido de nuestros propios errores y la capacidad de asimilar, la de los demás. Que podemos reconocer cuáles son nuestras debilidades para que cuando ellas salen saberlas dominar y no al contrario. De los duros golpes solamente se gana, cuando, somos capaces de no hacernos sus esclavos, sino que seamos quienes podamos dirigir cómo enfrentarlos, sin quedarnos varados.

Cada ser humano, tiene todo un mundo dentro de sí, que le permitirá ser, o su peor enemigo, o su mayor aliado, siempre que pueda identificar sus mejores cualidades, apreciarlas y ponerlas a desarrollar. Y estar consciente, que tiene todas las herramientas consigo para romper toda prueba u obstáculo que tenga de por medio, pero, primero debe creerlo y confiar en sí mismo, unido al poder divino, hacen el mejor equipo.