Producción

Una producción de Lucía Medina para Al final de la Tarde con Jordi.
Programa Nominado a Premios Gardo 2020, en Actualidad, Región Norte

martes, 30 de octubre de 2018

Reflexión del Día

“San Pablo, en uno de sus más importantes e impactantes discursos, dijo que a los ojos de Dios quien no tiene amor es “como címbalo que retiñe” eso me hizo pensar que “el ritmo de nuestro corazón marca un compás entre la vida y la muerte cuya música Dios escuchará hasta que termine la sinfonía de esta vida”. La familia, el matrimonio, los amigos, las hermandades no son más que espacios para ensayar el estilo de vida que tendremos en el cielo, a amar se aprende amando… en el roce, en el caer y levantarse, en el perdón y en el sacrificio. Ofender, airarse, odiar, resentirse, amargar, herir le bajan la nota al amor y se la suben al dolor, revisa eso, quien dice amar a Dios no vive desafinando”. (Cosme). 

Alguien nos preguntó en una oportunidad: “qué te hace luchar a este altura de tu vida; qué te motiva a creer que debes seguir sin rendirte? Le respondimos; la fe en Dios y el amor que sentimos en nuestra alma y que está dispuesta para todas las personas que me ligan o con quien me relaciono o que de una forma o de otra nos han hecho avanzar como ser humano. Hemos aprendido que los problemas estarán ahí como adversidades y pruebas; ellas no se irán hasta que no aprendamos de ellas; no podemos dejar de vivir porque aparecen una y otra situación. Hay quienes desean planificar su vida o si desea ser feliz o amar; dependiendo de que en ese momento no hay conflictos o cosas por resolver; y eso es como creer que la felicidad como el amor, dependen de si hoy estás enfrentando o no problemas, y es que ambas sirven como herramientas para luchar con mayor ahínco y no ir perdiendo lo que tenemos como luz en nuestro interior. Nosotros queremos decirles a otros y les aconsejamos sobre sus vidas; o dirigimos personas; pero no somos capaces de vernos a nosotros mismos y ensayar en nuestro haber todo lo que hemos aprendido y asimilado, sino que nos quedamos en la misma acera sin cruzar la calle, ya sea por temor o porque no nos hemos dado el permiso de enfrentar todo lo que nos toca, desde el y con el amor, es así que Dios desea que veamos cada obstáculo que tenemos. Es como luchar sin fe; es como vivir sin vida; porque siempre estarán ahí cosas por solucionar y nos podemos supeditar nuestra emoción por qué queremos hasta planificar cuando amamos y permitimos que nos amen. Ensayemos en nosotros mejores formas porque la que estamos utilizando no nos está dando resultado sino es dando oportunidad a lo que Dios quiere para vernos con mayor fe y creciendo en Él, así como un granito de mostaza, que a pesar de lo que debe atravesar, crece como un gran arbusto y ofrece sombra a quien lo requiere y tiene su raíz para sostenerse. Así debemos ver la presencia de Dios en nosotros. ¿De qué nos sirve, sino podemos aplicarla en nuestras vidas para estar mejor de lo que estamos? Ensaya en ti de una mejor manera. Desde el amor.

Quieres luchar o deseas rendirte porque no han salido las cosas como planificas siempre. O deseas crecer luchando y así hacer fuerte lo que es tu fe y el su presencia en ti?