A veces nosotros mismos debemos recordarnos todas las virtudes que poseemos. Si solamente te sacamos a relucir nuestras peores cualidades. Si solamente nos pensamos menos es como estar sin herramientas ni armas para enfrentar lo que nos toca. Somos los primeros que debemos darnos el valor que tenemos y poseemos. Recordar de cuántas luchas hemos sabido salir adelante y estamos de pies. No dejar de llenar con la Palabra nuestros corazones que lo que alienta el espíritu, sin el cual podemos luchar desde el interior.