A veces esperamos mucho de los hombres y es nuestro principal error. Lo que nunca debemos equivocarnos es saber agradecer que la presencia de Dios se manifieste de alguna manera. Él sabe cómo llegarte. Hay batallas diarias que si no fuese por ángeles que te envía Noa habría manera de estar de pies o evitar que sentimientos como:la rabia, el encono, la impotencia y la desesperación; se apoderen de tu corazón. Si otros lo han hecho no dejes que a ti te envenene el corazón.
Si otros te mienten, no lo hagas tú; si otros te maldicen, no lo hagas tú; si otros no muestran compasión o sensibilidad ante el Dolor, no lo hagas tú. Se quien debes ser ante Dios, no uses caretas como lo haces con los hombres. Se integró, esto es honesto te creas que te están viendo o no. Se honesto. Y sobretodo, agradecido, no dejes que las tormentas borren quien eres en esencia. No dejes que el pecado te arrastre con él y pierdas en ti tus mejores valores. No dejes de agradecer cada mañana, así como hoy, agradecemos este ángel que nos envía cada mañana como otras y otros, la forma en que Dios te dice: "Estoy aquí, contigo, en las buenas y en las malas”. Y dicen que Él no existe. Bendiciones a cada uno y que sea un día de gran provecho.