Producción

Una producción de Lucía Medina para Al final de la Tarde con Jordi.
Programa Nominado a Premios Gardo 2020, en Actualidad, Región Norte

martes, 20 de noviembre de 2018

Reflexión del Día

“No todas las verdades son masticables, algunas, es necesario tragarlas como píldoras. Por ejemplo, no hay éxito sostenible sin madurez, el éxito está destinado a descender, la madurez a empinarse. El éxito siempre sacudirá nuestro carácter para bien o para mal, con el manejo del poder como con el de nuestras debilidades y desafiará nuestra integridad. Cuidado con confundir las sombras de importantes experiencias con la luz de la madurez, mucho menos usar estrategias que deforman el alma, atrofian las relaciones y nos desarman emocional y espiritualmente. El egoísmo siempre nos llevará al protagonismo, mientras que amor nos conduce a madurar aún en el ocaso de una relación. Amemos siempre! Éxito es la lección aprendida de un fracaso anunciado, o la crónica de una resurrección que el amor nunca sepultó!”.  (Cosme).

Alguien me dijo: “los maduros también aman”. Y le agregue, todo es posible renacer de las cenizas, cuando se le imprime amor. Sea lo que sea. Ya fuere la transformación de un ser humano; una meta que se creía perdida; un objetivo o sueño que creíamos imposible renovar; un negocio que necesitamos levantar nueva vez; algo que cae en la rutina; entre otros; todo es posible cuando eres capaz de verte a ti mismo quien debe propulsar lo que se requiere en sí mismo o en lo que necesita hacer vivir nueva vez. Lo que sucede es que hoy día creemos más en dejar caer; no luchar; rendirnos ante las tormentas; y por eso vivimos comenzando sin aplicar las experiencias la sabiduría que debemos asimilar de nuestras caídas; golpes; fracasos. Queremos seguir siendo dominados por la ira; el encono; la soberbia; todos elementos de inmadurez. No permitimos ver más allá de nuestras limitaciones. Cuando puedes tomar el amor, como herramienta para utilizar abono en tierra que requiere renacer, todo es posible; todo puede volver a vivir de las cenizas cuando le imprimimos el amor como elemento. Sino pregúntate cuántas veces has sentido la presencia de Dios cuando te ha mostrado su compasión; su comprensión; y su apoyo; de alguna manera que lo que tú mismo no creías posible lo ha puesto ante tus ojos.