Producción

Una producción de Lucía Medina para Al final de la Tarde con Jordi.
Programa Nominado a Premios Gardo 2020, en Actualidad, Región Norte

domingo, 11 de noviembre de 2018

Reflexión del Día

Alguien me comentó hace un tiempo que debes dar a los demás el mismo trato y atención que te gustaría que hicieran contigo. Esto significa: cariño, comprensión, tolerancia, respeto y consideración. Todas estas palabras se reducen en una palabra, amor para ti y cada quien. Es lo que merecemos como seres humanos y lo que Dios espera que nos permitamos con los demás y nosotros mismos. Esa misma persona me contó una fábula: se trataba de una princesa que estaba sin desposarse había anunciado que quien quisiera su mano de sus pasar una gran prueba y una vez lograda pudiera ser rey. La misma consistía en que quien decidiera asumirla, debía permanecer 100 dos bajo el Sol, lluvia y tempestad. Muchos se anotaron, solamente al final quedó uno solo que pudo resistir todo y bajo las peores circunstancias. Y desde la ventana veía la hermosa diva aquel valiente y decidido enamorado permanecer hasta el día final. Una vez cumplida el reto, ella indicó: “tú has ganado y mereces ser rey y casarte conmigo”. El desgastado ganador le respondió: “no deseo tomar esa posición porque si usted fue capaz de verme por todo esos días bajo las condiciones que pase y no fue capaz de detener y reconocer todo aquello, no tiene los sentimientos buenos que se merecen para la consideración de alguien y ni siquiera el trato que se merece toda persona”.

Procuremos no colocarnos en la vida en el lugar de quien actúa sin misericordia y crueldad frente a otros que se pueden encontrar en un momento de vulnerabilidad y debilidad. Dios nos coloca pruebas indecibles o permite que las mimadas sucedan, pero sabemos que siempre está ahí para con su presencia darnos apoyo pero nunca permite degradarnos. Recordemos mirarnos y mirar al otro, ahí sabremos que en la medida que nos tratamos, tratamos. O al ver al otro podemos mirar cómo estamos actuando y reflejando a Dios.