Producción

Una producción de Lucía Medina para Al final de la Tarde con Jordi.
Programa Nominado a Premios Gardo 2020, en Actualidad, Región Norte

viernes, 30 de marzo de 2018

Reflexión del Día

“Todo lo que comenzó, bien o mal, tuvo un principio. En el libro de Job vemos con aliento el sabio consejo de nunca menospreciar los principios pequeños, dice: “Aunque tu principio haya sido insignificante, con todo, tu final aumentará sobremanera”.​ Esforzarse y creer contra pronósticos es la primera razón para obtener grandes recompensas; nada terminará bien sin al menos comenzar, debes primero emprender la marcha para poder entrar al camino que Dios te ha invitado a proseguir. Comenzar significa romper la barrera de la inercia, ingresar a la comunidad de los atrevidos y barrer con el temor. Todos, grandes o pequeños, novatos o veteranos, experimentamos la misma cantidad de temor, la diferencia la hacen quienes por fe ven el final desde el principio y le sonríen”. (Cosme). 

Ayer leía esta frase: “paciencia que Dios no desespera, solo espera”. Y es que no queremos ponernos a los pies de quien podrá darnos la respuesta que buscamos, pero muchas veces no podemos ver o ni siquiera sabemos cómo hacerlo.

A veces hay situaciones que no tienen la solución a corto plazo o al menos no para los ojos humanos. Hay episodios de nuestra vida que solamente podemos sentirnos tranquilos porque hemos decidió dejar todo en sus manos y que sea la fe la que nos responda cada día el mensaje que necesitamos para no ser de los que se rinden o se sienten derrotados por la desesperación y la ansiedad. Alguien me dijo: “para combatir ante las pruebas es necesario que te conviertas en comandante de tus pensamientos y no en un simple soldado”. Cuidado si aquello que domina tu vida ante la adversidades es tu cabeza y no la fuerza interior y la presencia de Dios.