“Aquellas personas que se acostumbran a poner el “no” por delante, terminan quedando de último, o lo que es peor, en nada. Porque todo aquel que cree que no se puede, ya llegó. De manera que cuando te haces acompañar por pesimistas, por no caer en el hoyo, te quedas varado.
Lo cierto es que todo aquel que piensa en negativo y pone un no antes de examinar todos los posibles “si” es porque en realidad se está negando a la posibilidad de entregar todo su potencial para hacer de una posibilidad una realidad.
La Biblia dice que “para el que cree, todo es posible” y estoy convencida de que Dios con poco hace mucho, con algo hace bastante, con nada puede hacer todo y con mi fe hará milagros!”. (Cosme).
Cuando pones todas tus fuerzas en las manos de Dios y confiado y entregas a Él y que todo sea para su gloria, muchas cosas pueden suceder delante de los ojos de los incrédulos y de los tuyos para que no quede dudas de su presencia, aún de aquellos que piensan que nada es posible bajo su amparo. Perdernos en las dudas ante las angustias y las situaciones que pasamos no nos ofrece respuestas de bien ni de fortaleza, nos sigue derribando y nos mantiene perdidos. Mantenemos en la oración y en la confianza de la misma, nos mantiene en su camino y en las bondades que Él es capaz de mostrarnos para nuestro bien. Creele y confía desde el corazón y vence.
Camina teniendo tu interior con un corazón que lo dispongas para Él.