Producción

Una producción de Lucía Medina para Al final de la Tarde con Jordi.
Programa Nominado a Premios Gardo 2020, en Actualidad, Región Norte

lunes, 16 de abril de 2018

Reflexión del Día

“La primera de las leyes dadas a la humanidad aún vigente es: Amar a Dios sobre todas las cosas... Ésta deja de ser una orden inmediatamente la observamos, porque “amarle” es ver nuestra insignificancia ante lo inconmensurable de su Ser, aceptar Su mayor grandeza, amar y perdonar con entrega indescriptible a quienes nada merecen. ¿Por qué llegar a tal convencimiento? Como consecuencia de una abrumadora realidad, de una desbordante avalancha de evidencias, manifiestas en medio de las más profundas aflicciones, ¡cuando sólo Él encaja! Y es que Dios nos ama como si fuéramos el único ser en la tierra a quien amar, centra su atención en nuestro dolor, contesta nuestra oración como su prioridad, convierte nuestros enemigos en los suyos y nuestros sueños en su causa”. (Cosme).

Es indescriptible cuando puedes sentir la presencia del Todopoderoso en ti. Cuando se dan esas diosidencias con algún hecho; algún pasaje que se repite y repite contigo y más cuando en el momento estás necesitando un aliento, llega de manos de alguien que ni conoces o que quizás tenía tiempo que no tenías contacto. Cuando simplemente te sientes acompañado porque Él ha enviado alguna manera de que sientas que te está diciendo: te protejo o no te están a solas. O les sigo en sus sueños o a través de sus conciencias. De alguna manera, está presente cuando le permitimos ser el centro de nuestras vidas. Si no fuera por Él, todo si sería un imposible insalvable. Con Él, todo imposible, es solo una forma de apreciar su poder ante nosotros y hacerlo realidad con un milagro, que ha respondido a través de la oración y la perseverancia de nuestra fe.