Producción

Una producción de Lucía Medina para Al final de la Tarde con Jordi.
Programa Nominado a Premios Gardo 2020, en Actualidad, Región Norte

martes, 26 de septiembre de 2017

Reflexión del Día

"Generalmente desarrollamos el intelecto y no el espíritu. El desarrollo del espíritu es el principio de nuestra madurez. Maduramos al comenzar a entender que necesitamos fe para aquello que no podemos entender, confianza para lo que es necesario creer, y paciencia para terminar de entenderlo todo, así como para continuar aquello que Dios ya me hizo entender. La madurez comienza cuando la insensatez cesa. Pero algo es definitivo, hay cosas que aunque no las entendamos seguirán su curso, sucederán. Cada proceso nos va madurando y simultáneamente las circunstancias se aclaran y mejoran. No importa cuanto ignoremos algo, no por ello detendremos las consecuencias; hemos de dar cuentas por lo que sabemos y no hacemos, y lo que entendimos pero no aplicamos. Madurar no es demostrar ser fértil, ¡es practicar lo fructífero!". (Cosme).

Muchas veces no queremos entender que la fe se va ejerciendo, creciendo, desarrollando y fortaleciendo con el día a día, con los acontecimientos de que seamos testigos o autores. Es todo un proceso, por lo que dependerá de lo que asimilemos en cada experiencia y cómo lo hacemos. De esto dependerá qué tan fuerte sea y sobretodo el tiempo que nos tome asimilar esto para que pueda ir influyendo en abrir o no nuestros corazones de modo tal que esté más o menos dispuestos para saber recibir lo inconcebible a los ojos del ser humano o que sea un imposible, por siempre, acorde a nuestra soberbia. Hay unos mas que otros, son puestos a mayores pruebas, no por ello son menos ante los ojos de Dios, es más bien que su propósito es y será utilizado por el Todopoderoso ante los que aun no creen en su promesa o viven lleno de dudas. Es ahí donde está el gran milagro.