Producción

Una producción de Lucía Medina para Al final de la Tarde con Jordi.
Programa Nominado a Premios Gardo 2020, en Actualidad, Región Norte.
Desde 2 de Junio de 2024.

miércoles, 28 de diciembre de 2022

#2140 AFDLT con Jordi - 28 Dic.

[16:39] Un Día como Hoy
  1. Día de los Inocentes.
  2. 2014: El Vuelo 8501 de Indonesia AirAsia, un Airbus A320, cae al mar de Java. Cubría la ruta desde el aeropuerto Internacional de Juanda, (Indonesia), a Singapur. Murieron sus 162 ocupantes.
  3. 1895: Los hermanos Louis y Auguste Lumière presentan la primera proyección al público de su cinematógrafo en el Salon indien du Grand Café, en París (Francia).
  4. 1895: El físico alemán Wilhelm Röntgen hace público sus experimentos sobre los rayos X, en la ciudad de Wurzburgo (Alemania).
  5. 1886: La inventora y empresaria estadounidense Josephine Cochrane, se le concede la patente en Estados Unidos por su invento: el lavavajillas.
  6. 1065: Se funda la abadía de Westminster, en Londres (Inglaterra). Lugar tradicional para las coronaciones de los monarcas ingleses y panteón real.
[24:42] Debates al Aire

Año 2023: Mejorar la paz en Rep. Dom. con Susi Pola.

En el año 2022, como los últimos años, la violencia social ha estado presente en nuestra cotidianidad de manera preocupante. Si bien las cifras oficiales nos hablan de un descenso de las violencias delincuenciales, eso dice la PN y la administración política en general, y en el Seminario Internacional Seguridad, Ciudadanía y Convivencia Post COVID en América Latina realizado en los primeros días de este diciembre, se reveló que República Dominicana tiene una tasa de homicidios de 10,3, siendo este uno de los países más bajos de la región.

Sin embargo, la percepción de más del 50% de la ciudadanía en nuestro país, ve la violencia como el mayor riesgo que enfrentan en su vida diaria, de acuerdo al índice de Paz Global de 2022. (Afganistán, Brasil, Sudáfrica, México y República Dominicana)

Y la percepción subjetiva que tiene la población sobre la violencia, registrada mediante encuestas de opinión, victimización y del conocimiento de la problemática, junto con la medición de tasas de violencia y las múltiples estadísticas delictivas generadas por robos, asaltos, violencia género, etc., son métodos válidos de diagnosticar la violencia.

Es importante saber si somos o no, un país violento, porque se pierden tenemos cifras alarmantes de pérdidas de vidas de dominicanos y dominicanas en acciones violentas, homicidios, feminicidios, accidentes de tránsito. Lo importantes, es que, en las cifras, las ejecuciones de estos crímenes son masculinas, un factor muy importante a considerar a la hora de reformar prácticas y actitudes.

En general, somos una sociedad intolerante en la que, la mayoría de las personas no maneja el auto control ni los criterios de resolución de conflictos. El mismo Estado administrado por el gobierno que sea, solo da respuestas a la solicitud de reivindicaciones del pueblo, cuando estas van acompañadas de actos de violencia.

Si hablamos de accidentes, República Dominicana ocupa el primer lugar en la lista de países con mayor tasa de mortalidad ocurrida por accidentes de tránsito en el mundo al año, según las estadísticas más recientes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dadas a conocer en julio de este año.

De acuerdo con los datos de la OMS actualizados a 2020-2021, son cinco países de África y Latinoamérica que encabezan en el ranking de la mayor cantidad de accidentes fatales en las calles, carreteras y autopistas. Para la OMS, la principal causa de muerte en jóvenes en el rango de 15 a 29 años son los accidentes de tránsito

República Dominicana ocupa la primera posición con 64.6 muertes al año por cada cien mil habitantes, de las cuales la abrumadora mayoría, un 87 %, corresponde a personas del sexo masculino, mientras solo un 13 % de las víctimas son mujeres.

Más de la mitad de estas muertes a nivel mundial corresponden a peatones, ciclistas y motociclistas, los llamados “usuarios vulnerables de la vía pública”, según observa la OMS. En República Dominicana, los fallecidos anuales por accidentes de tránsito rondan las 3,000 personas.

Y tomamos los accidentes porque, en quince años (2007-2021) murieron en el país 27,608 personas en accidentes de tránsito, según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE), representando un promedio de 1,840.5 muertes por año, lo que se convirtió en el pasado 2021 como la principal causa de muerte en el país.

De acuerdo con Medicina Legal, las principales causas de accidentes en las vías del país obedecen al exceso de velocidad (45%), desobedecer señales de tránsito (42%), embriaguez (4%) y conducir en contravía (3 %).  Falta de pericia, el descuido y los efectos del alcohol y las drogas son los factores humanos más comunes que conducen a un accidente vial. De hecho, se cree que el 22.1% de los siniestros de tránsito se debe al uso del teléfono mientras se conduce.

El caso es que, los accidentes nos muestran la reacción frente a si mismas de las personas, y ante otras también. Es decir, la valoración personal y la de terceras personas, que se tiene.

Porque los accidentes, no son aleatorios ni imprevisibles, y usualmente están acompañados por corresponsabilidades, como pueden ser ajenas a la conductora o conductor (falta de señalización adecuada, carencia de iluminación en las calles, falla mecánica del vehículo, la mala construcción o el mal estado de una calle/avenida, etc.), así como propios del o de los conductores y las conductoras en cuestión (no respetar las señales de tránsito, conducir en estado de ebriedad u otros efectos de estupefacientes, distracciones como utilizar el celular mientras se maneja, conducir con exceso de velocidad, realizar maniobras peligrosas, etc.).

Si bien no hay intención de lastimar, hay culpa y negligencia que indican esa poca valoración de cada persona misma y de respeto a las demás, una actitud desaprensiva que se convierte en violencia.

Y es ahí, cuando tomamos el volante cuando las personas demostramos el nivel de responsabilidad personal y comunitaria, y una sin la otra, no funcionan, porque somos un racimo, como creo decía San Pablo en alguna de sus cartas, en la Biblia.

Y claro, después están las otras violencias cotidianas que la mayoría de la ciudadanía percibe: delincuencia que vulnera a las víctimas cada vez con mayor violencia. Violencia en el espacio familiar, de pareja, contra las mujeres, de las cuales solemos hablar.

¡Pero este último miércoles del año queremos pensar en cómo sería un cambio en esta cultura nuestra, reactivamente violenta! Porque deseamos un 2023 en el que empecemos a entendernos, respetar la dignidad personal y la de todas y todos, a caminar hacia una R. Dominicana donde los índices de violencia bajen porque así lo decidimos. ¡Feliz Año Nuevo!

[41:12] Aconteceres de Impacto

[56:37] Comentario al Final del Día